Las máquinas que transforman a energía eléctrica en mecánica y funcionan con potencias pequeñas de hasta 5HP con una potencia de 220 voltios son los conocidos como motores monofásicos. Los encuentras en taladros, ventiladores, licuadoras, lavadoras entre otros.
Características y componentes
Por lo general, los motores monofásicos tienen un estator que funciona con electricidad y permite que el motor rote. Incluye un colector o conmutador que ayuda a la transmisión de la carga mientras está en funcionamiento. Tiene un revestimiento exterior fabricado en acero inoxidable que protege el resto de las piezas que lo forman. Posee dos tapas y un ventilador que ayuda a evitar que se recaliente cuando están encendidos los motores monofásicos. Su rotor o estator están conectados a una red que trabaja por inducción, por lo que tiene una cualidad asincrónica. Son universales, emplean un sistema de embobinado para arrancar, requieren de un mecanismo que gire y de mayor velocidad. Igualmente, tienen un devanador que ayuda a los circuitos en su fase de arranque. Los capacitadores o condensadores internos permiten multiplicar la potencia de giro. Llevan otros motores con polos estatóricos incorporados de tamaños más pequeños con menor potencia. Estos motores monofásicos son muy empleados cuando hay carencia de sistemas trifásicos.
Tipos de motores monofásicos
Se pueden conseguir tres tipos de motores monofásicos que son los de fase de partida, el cual permite que el bobinado trabaje mediante un campo magnético creado por el devanador. También, está el de arranque por condensador que utiliza varios motores para su completo funcionamiento y los puedes encontrar en bombas, compresores, lavadoras industriales, etc. Los que funcionan mediante una red espiral de cortocircuito, emplean un devanado monofásico. Llevan incorporado piezas polarizadas y una bobina que crean el campo magnético rotatorio, equilibran la máquina para ponerla en funcionamiento. Tienen una intensidad de corriente de tipo nominal, la cual emplean cuando funcionan en condiciones normales. Al vacío que la usan los motores monofásicos cuando la energía está entre 20% o 30%. La de arranque solo es consumida cuando encienden el equipo y la de rotor bloqueado se observa cuando el equipo está completamente detenido.
Ventajas: Resultan menos costosos que otros modelos de motores, porque los elementos que lo forman pueden conseguirse en cualquier lado y casi no requieren mantenimiento. Su mecánica es muy simple, debido a que funcionan con corrientes alternas. Son fáciles de utilizar en comparación a los motores trifásicos. Gracias a su equipo de inducción puede autoiniciarse. Debido a que su corriente es inducida, funciona con baja resistencia. La salida de la energía se puede moderar de baja a alta, lo cual ayuda a disminuir la pérdida de corriente eléctrica. Permite que el motor siga funcionando sin que el proceso sea tan complicado. Son dispositivos pequeños y sumamente resistentes, por lo que los emplean para equipos pesados.
Desventajas: Algunas veces no encienden porque se recalientan. Comienzan a funcionar con lentitud, por esta razón suele verse más en electrodomésticos y pequeños equipos de trabajo. Requiere de equipos auxiliares para que arranque Solo se pueden usar en equipos que requieran poco voltaje Este tipo de motor es muy eficiente porque mantiene su carga entre 85% - 97%. Por carecer de cepillos, evita que se creen chispas y pueda ser operado en situaciones peligrosas. Solo emplea dos tipos de cable el neutro y el caliente. Posee una parte fija, otra móvil. Además genera poco ruido y vibraciones cuando está en funcionamiento.